En Comunidades del Sur Habitat recibimos este premio con gran ilusión porque es el reconocimiento a una política de empresa no planeada sino que es producto de la humanidad y humildad en el trato con su personal de los creadores de esta empresa familiar, los hermanos Manuel y Juan Gómez y su capacidad de inculcar la misma a mí, su actual gerente Begoña Gómez.
La idea de presentarnos a este galardón fue mía ya que cuando mi hermana, amigas mías o compañeras del sector me hablaban de cómo les afectaba la falta de sensibilización familiar en sus empresas, yo pensaba que nuestro funcionamiento difería mucho de lo que me contaban, por lo que este premio lo ratifica y nos motiva a seguir en esta dirección. Todo el equipo de Comunidades del Sur Habitat lo ha recibido con gran entusiasmo y con el orgullo de pertenecer a esta gran familia que somos, ya que ellas son  las que demuestran día a día que se puede crecer profesionalmente sin desatender nuestra vida personal. Preparé la candidatura con mucha ilusión ya que fue en los últimos meses de embarazo y recibí la noticia del premio apenas un mes después de nacer mi tercer hijo.
La preocupación y la sensibilización de las personas e instituciones por alcanzar niveles razonables de conciliación de la vida familiar y laboral es un fenómeno que nos lo encontramos día a día. Este interés se debe a la unión de varios factores como son el avance en la igualdad de género, la necesidad de mejora de la calidad de vida, los cambios en los modelos de familia, la preocupación por la educación de nuestros hijos, el desarrollo de nuevas tecnologías que permiten otras formas de trabajo, la necesidad de gestionar mejor a los empleados en las empresas y la necesidad de fomentar la natalidad.
Hay tres ámbitos que deben ir de la mano en los que actúan las medidas que pueden facilitar la conciliación de vida familiar y laboral. El primero es el estatal mediante leyes que lo regulen, el segundo es el empresarial mediante las medidas de conciliación y el tercero es el social mediante un cambio cultural que gire hacia un horario más racional que permita liberar horas diarias para dedicar a la vida familiar y personal.

La empresa inmobiliaria tiene unos horarios complicados ya que se asemejan a los horarios comerciales de tiendas con la dificultad añadida de que, en muchas ocasiones, hay que estar disponible cuando el cliente termina su jornada laboral o está en su descanso de comida, pero no es imposible conseguir la conciliación de la vida personal y laboral de nuestros trabajadores. Redacto este artículo como gerente de Comunidades del Sur, empresa promotora e inmobiliaria creada en 1985, y como madre de familia. Soy Ingeniero Industrial y mi incorporación a la empresa se produjo en el año 2.004. Tuve a mi primera hija en el año 2008, a la segunda en el año 2010 y el tercero lo he tenido recientemente en abril de 2016. Aunque desde que fui madre me he sentido apoyada en la conciliación de mi vida personal y laboral dentro de la empresa, como profesional y como madre, he implantado en la empresa políticas de conciliación que han hecho que las doce empleadas que trabajamos en la empresa lo hagamos en un ambiente que nos permite conciliar nuestro  trabajo con nuestra vida familiar. Tenemos que partir de la base de que las medidas de conciliación pueden aplicarse si hay un compromiso reciproco entre ellas y los trabajadores, es decir, necesitamos trabajadores comprometidos con la empresa y responsables. De todas formas, intentaré hacer ver que con estas prácticas de conciliación se consigue que, a través de una mejor satisfacción y motivación del personal, el compromiso, la responsabilidad y la autogestión vienen solas.
En muy importante distinguir que conciliar no supone trabajar menos, sino de forma distinta, de forma más eficiente. Conciliar no significa trabajar menos, sino trabajar mejor.  Algo muy importante es contar con horarios flexibles adaptados a las necesidades de cada empleado/a.  Asimismo,  el empelado debe saber que tiene flexibilidad para una visita al médico con sus descendientes o ascendientes o un permiso para poder ir a ver la actuación de su hijo/a al colegio. Otras veces tenemos el caso de que un emplead trabaja desde su casa porque tiene a su hijo/a enfermo/a y no tiene con quien dejarle. Partimos de la base de que confiamos en que tenemos un personal responsable cuya intención no es engañar a la empresa.
Es decir, de lo que se trata es de fomentar una mayor responsabilidad y concienciación de los trabajadores y las trabajadoras, flexibilización horaria, relativización del tiempo como criterio determinante del trabajo contratado, autoorganización de la actividad laboral y aprovechamiento de las nuevas tecnologías, lo que a su vez relativiza el espacio de trabajo. Se trata de abandonar esa cultura tan extendida en España de confundir trabajo con permanencia en el puesto. Obtener un pleno rendimiento de nuestros empleados esta directamente relacionado al bienestar de ellos y rendirán a un mayor nivel cuando sus necesidades de vida personal y familiar estén cubiertas.

Son muchos los beneficios que nos hemos encontrado al implantar políticas de conciliación familiar, aumento de la motivación y satisfacción en el trabajo, mayor responsabilidad y autorregulación, desarrollan plenamente su carrera sin tener que renunciar a su vida personal, mayor estabilidad profesional ya que se fortalece la lealtad de los trabajadores, reducción del estrés de los empleados lo que supone una mejora en la salud laboral y mejor calidad de vida al poder dedicar tiempo a otros intereses distintos al trabajo

La conciliación de la vida laboral, familiar y personal contribuye a construir una sociedad basada en la calidad de vida de las personas, primando las mismas oportunidades a las mujeres y a los hombres con el fin de poder desarrollarse en todos los ámbitos vitales, progresar profesionalmente, atender las responsabilidades familiares y poder disfrutar del tiempo, tanto personal como familiar. Debe ser un reto para nuestras empresas facilitar la conciliación laboral a los trabajadores. Un reto que puede reportar importantes ahorros a nuestras empresas, mejoras en la productividad y reducción de los niveles de absentismo.